Cruzando las Arenas.

Alguna vez desprecié la luz
del sol y su calor,
y la luna y su palidez,
y los caminos fueron iguales,
y dio lo mismo acá que allá,
y bebí agua sin tener sed,
y la sed fue imposible de calmar,

alguna vez vivir y morir fueron sinónimos,
y la vida duró nada más que nueve meses,
y una palabra me lastimó más que la peor de las heridas,
y la herida fue una cruz y la cruz una pesada carga,
y sus pasos llegaron a mi puerta,
y la puerta no se abrió, a pesar de los golpes,

alguna vez quise partir para nunca volver,
y también quedarme para poder intentarlo,
y la libertad de cárceles sin rejas me ató de pies y manos,
y Dios no fue suficiente,
y amé como si la vida me fuese en ello,
y no me importó que me amaras, sólo alguna vez.

Para encontrar mi sentir en un grano de arena,
cruzo las arenas,
abrazando el infinito en las palmas,
siendo, mientras el silencio habla.

MarceloRoberto Galán Capel.
Tinta de Sangre.
Poeta Argentino.

Relieve modelado en arcilla. Acrílico sobre cerámica en base de mármol.
48 cms. x 65 cms.